La pandemia se desató hace un año. Un año que ha tenido 267.822 noches.
Una noche por cada una de las 267.822 niñas y niños que no podrán continuar sus estudios tras un año la pandemia.
267.822 niñas y niños en situación de vulnerabilidad que dicen adiós a su futuro por un presente maldito.
Pero también 267.822 motivos para actuar.
Sólo en Chile hay un 50% más de niñas, niños y adolescentes que han quedado fuera del sistema escolar tras la pandemia. Y sólo 4 de cada 10 estudiantes han recibido clases online todos los días.
Se estima que esta perdida de educación que la pobreza extrema en la niñez aumente un 22%.
Pero aún estamos a tiempo de cambair ese futuro negro que se cierne sobre la infancia chilena. Ese futuro lo decides tú. Ese futuro lo decides hoy.
En Good Neighbors creemos que la educación es la mejor herramienta para romper este círculo vicioso, y trabajamos para que todos los niños y niñas tengan acceso a una educación de calidad.
$5,000/mes al mes nos ayudan a asegurar que niñas como Adela tengan acceso a una educación de calidad.
Ayúdanos a poner luz a cada una de esas noches. Hazte socio/a hoy.
El 2020 fue un año devastador para todos, pero sobre todo para los más pequeños y más vulnerables. Por eso en el 2021 lanzamos la campaña Good Chile, una comunidad de buenos/as vecinos/as dispuesta a trabajar por la igualdad y a mejorar el ahora y el mañana de niños y niñas, hoy y siempre.
Los primeros socios recibirán el pack de bienvenida que incluye
*Diseño final puede diferir del actual
En chile 1 de cada 5 niños vive en pobreza extrema.
1 de cada 10 trabaja para sobrevivir.
Un círculo vicioso que conduce al abandono escolar y a un futuro incierto, donde la criminalidad, la adicción y la pobreza extrema pueden ser los protagonistas.
Pero ese futuro se decide hoy. Ese futuro lo decides tú.
En Good Neighbours creemos que la educación es la mejor herramienta para romper este círculo vicioso, y luchamos porque todos los niños y niñas tengan acceso a una educación de calidad.
$10,000 al mes nos ayudan a asegurar que niños como Antonio tienen acceso a una educación de calidad.
Porque educando a la infancia, protegemos a Chile.